El papel de estrella invitada de Donald Trump en “Mi pobre angelito: Perdido en Nueva York” no fue un guiño a su talento actoral, resulta que estaba exigiendo el papel a cambio de permitir la filmación en su hotel.
Director Chris Columbus le dijo a Business Insider cómo Trump trazó una línea en la arena al exigir una aparición en la película a cambio de permitirles filmar en el Plaza.
Columbus dijo: “Como la mayoría de los lugares en Nueva York, puedes pagar una cuota que te permite rodar en ese lugar. Nos pusimos en contacto con el Hotel Plaza, propiedad de Trump en aquel momento, porque queríamos rodar en el vestíbulo ya que no podíamos reconstruir The Plaza en un plató”.
Chris dijo que el futuro Presidente fue tajante… “Trump dijo que de acuerdo. Pagamos la cuota, pero también dijo: ‘La única forma en que puedes usar el Plaza es si estoy en la película'”.
Parece que Columbus pensó que Trump sería una molestia para el público, pero fue todo lo contrario: “Cuando la proyectamos por primera vez ocurrió lo más extraño: La gente aplaudió cuando Trump apareció en pantalla. Así que le dije a mi editor: ‘Déjalo en la película. Es un momento para el público’. Pero se coló a la fuerza en la película”.
Un presagio de lo que está por venir, tal vez.