Britney Spears ha estado pasando desapercibida desde la publicación de sus memorias el mes pasado, pero ahora está saliendo en público de nuevo y hay que decir que se ve muy feliz.
La estrella del pop (y ahora autora) fue fotografiada el sábado por la tarde en West Hollywood, donde fue a cenar al Chateau Marmont con su manager, Cade Hudson. Ella también tenía un amigo peludo de etiqueta que incluso se subió en el asiento del conductor cuando se fueron.
Como dijimos, Brit se ve radiante, mostrando una enorme sonrisa mientras los paparazzi disparaban. Se le vio caminando con mucha confianza mientras lucía un traje de color naranja brillante, botas y gafas de sol.
Se podría decir que está bastante satisfecha por los resultados de “The Woman in Me”, que salió hace un mes, entregando toneladas de datos polémicos.
No vamos a repetir todo de nuevo, pero digamos que ella ganó un montón de simpatía y apoyo adicional de parte de la gente gracias sus historias personales. Esto le viene muy bien, ya que había perdido algo de popularidad después de la tutela.
Ahora, sin embargo, Brit tiene al público de vuelta de su lado y ella parece saberlo. Por supuesto, también está el hecho de que ella está recibiendo una buena parte de las ventas netas del libro, el cual ha sido un artículo muy vendido con más de 1.1 millones de copias vendidas en la primera semana.
Así que sí, Britney ha sacado algo bueno entre todo su drama.
En cuanto a la conducción, bueno, aquí está la esperanza de que ella frena su rollo y puede permanecer entre las líneas en la carretera. Ya le han puesto un par de multas de tráfico en el último año.
Aparte de eso, es genial verla fuera y de buen humor. It’s Britney bitch!